Hoy vamos a preparar una rica, suave y deliciosa tarta de
piruletas, ideal para tomarla estos días de calor. La receta esta prácticamente
en la mayoría de los blogs, por lo cual no se quien es el autor de la misma,
por lo cual no nombro a nadie en particular, pidiendo perdón al autor.
Comentaros que es muy fácil de preparar y con un sabor delicioso. Si no
disponemos de licor de piruleta lo podemos sustituir por granadina, o no
ponerle nada, aunque el licor le da un toque buenísimo y un poco de colorido, por lo cual si podéis es mejor ponerlo.
INGREDIENTES:
- 100 g Galletas (tipo maría)
- 350 g Nata (para montar)
- 5 Hojas de gelatina (10 g)
- 1 Yogur griego (natural)
- 1 y ½
Azúcar (tomando como medida el vaso del yogur)
- 6 Piruletas
- 50 ml Agua
- 30
ml Licor de piruleta (de venta en Carrefour)
- 50 g Mantequilla derretida
- Piruletas y golosinas para decorar
(opcional)
PREPARACIÓN:
Lo
primero que hacemos es poner un poco de agua fría en un bol y poner en el las
hojas de gelatina, para que se nos vayan hidratando. Seguidamente trituramos
los 100 g de galletas, con ayuda de batidora, termomix, etc. o simplemente las
metemos en una bolsa y con un rodillo o botella las trituramos bien. A
continuación derretimos los 50 g de mantequilla y la añadimos a las galletas
trituradas, mezclándolas bien hasta conseguir una pasta, si fuera necesario le
podemos añadir un chorrito de leche.
Seguidamente forramos la base de un molde
desmontable (de 20 o 22 cm), con papel de horno y cubrimos toda la base con la
pasta de galletas que hemos preparado anteriormente, lo metemos en el
frigorífico y reservamos.
A continuación le cortamos los palos a las 6
piruletas, ponemos en un cazo los 50 ml de agua, lo llevamos al fuego y
añadimos las 6 piruletas, dándole vueltas hasta que estén completamente
disueltas en el agua. Una vez disueltas retiramos del fuego y le añadimos las 5
hojas de gelatina que teníamos hidratándose, bien escurridas, removiéndolas
bien hasta que estén completamente disueltas.
Seguidamente ponemos en un bol,
el yogur griego, la medida y media del yogur de azúcar y los 30 ml de licor de
piruletas, con ayuda de unas varillas, tenedor u espátula mezclamos bien los tres
ingredientes.
Una vez mezclados añadimos al bol la mezcla de agua con las
piruletas y la gelatina que hemos preparado anteriormente, mezclando bien todos
los ingredientes.
Seguidamente con ayuda de una batidora de varillas o unas
varillas, montamos la nata. Una vez montada la añadimos al bol donde tenemos el
resto de ingredientes, mezclando con ayuda de una espátula de silicona o una
cuchara de madera, con movimientos envolventes (no remover), hasta que estén
todos los ingredientes unidos.
Seguidamente sacamos nuestro molde que tenemos
con la base de galletas en el frigorífico y volcamos en el la mezcla o crema que hemos preparado
anteriormente. Metemos en el frigorífico como mínimo unas 8 horas hasta que
cuaje la tarta, aunque lo mejor es dejarla de un día para otro.
Una vez cuajada
sacamos del frigorífico y con cuidado desmoldamos, decorando a gusto de cada
uno, con caramelos, gominolas, piruletas, etc.
Con esto tenemos nuestra rica,
suave y deliciosa tarta lista para degustar.