En primer lugar y más
importante es que os encontréis tanto vosotros como toda la familia muy bien.
Hoy vamos a preparar un típico y rico
bizcocho de yogur, pero añadiéndole unas manzanas para que resulte más jugoso
al paladar, aparte de que este tipo de fruta asada le aporta mucho sabor y una
textura muy suave. Yo como os pongo en
la receta he utilizado manzanas Golden, pero podéis utilizar otro tipo de
manzana que os guste más. Al ponerle el azúcar por toda la superficie, veréis
en las fotografías que se forma una capa muy fina y crujiente. Si no disponéis de
varillas eléctricas lo podemos batir con unas simples varillas manuales.
INGREDIENTES:
- 1
Yogur natural
- 3
Vasos del yogur de harina
- 2 Vasos del yogur de azúcar
- 1
Vaso del yogur de aceite de girasol
- 4
Huevos de la L
- 2 Manzanas (Golden)
- 1 Sobre
levadura química (Tipo Royal)
- Ralladura
de la piel de un limón
- Azúcar
PREPARACIÓN:
Lo
primero que hacemos es encender nuestro horno
a 180º por arriba y por abajo, para que se vaya precalentando. A
continuación forramos el fondo de nuestro molde con papel sulfurizado (papel de
hornear, el molde mejor desmontable), engrasamos con un poquito de mantequilla
o margarina y le espolvoreamos con un poquito de harina y reservamos.
Seguidamente ponemos en un bol amplio el yogur natural, y después con el vaso del mismo yogur vamos echando las cantidades
indicadas es decir dos medidas de azúcar, una medida de aceite de girasol y los
cuatro huevos.
Añadimos también la ralladura de la piel del limón (el limón le
limpiamos antes de rallarlo) y el sobre de levadura química. Con ayuda de unas
varillas (mejor eléctricas) batimos todo muy bien hasta que se unan todos los
ingredientes.
Seguidamente con ayuda de un colador vamos tamizando la harina y
la agregamos al bol poco a poco sin dejar de batir, hasta que consigamos una
mezcla homogénea y sin grumos.
A continuación lavamos las manzanas las descorazonamos, las pelamos y las cortamos
en gajos más bien finos.
Seguidamente en el molde que habíamos engrasado
previamente, vertemos parte de la masa del bizcocho, y vamos colocando la mitad
de los gajos de manzana, después añadimos otro poco de la masa, otra de gajos
de manzana y finalmente vertemos el resto de la masa. Seguidamente le
espolvoreamos por arriba abundante azúcar, para cuando lo horneemos forme una
capa fina y crujiente.
A continuación metemos en el horno que ya estará
precalentado a 180º, por arriba y por abajo, durante aproximadamente 30 o 35
minutos, esto como suelo decir depende de cada horno pues no todos calientan
igual, de todas formas los bizcochos siempre hay que pincharlos antes de
sacarlos del horno, para saber si el interior está bien hecho o no, lo que
podemos usar una aguja de punto, un palillo o la punta de un cuchillo, y si
sale limpio es porque por dentro ya lo tienes listo. Si por el contrario ves
que sale manchado con restos de masa, debes dejarlo un poco más. Pasado
este tiempo sacamos del horno y dejamos enfriar un poco antes de desmoldarlo.
Una vez templado desmoldamos y lo tenemos listo para saborear.
¡POR FAVOR CUIDAROS MUCHO!