Hoy vamos a preparar unas
crujientes y deliciosas pechugas de pollo marinadas al estilo japonés, esta
receta gusta a todo el mundo, pero en especial a los más pequeños de la casa. Como
veréis es muy fácil de preparar y con pocos ingredientes. Yo como veréis las he
enharinado en una bolsa de plástico, de este modo no tendremos exceso de
harina, pero perfectamente las podéis enharinar de forma tradicional, poniendo
la harina en un plato. La harina de maíz hace que se queden muy crujientes y
para nada están secas, gracias al macerado. Si os gusta a la hora de enharinarlas,
podéis poner en la harina un poquito de pimienta molida, eso depende de
vuestros gustos. Yo no le he puesto nada de sal, pues al macerarlas con la
soja, está es muy sabrosa. Espero que os guste y os animéis a preparar está
sencilla, pero deliciosa receta.
INGREDIENTES:
- 500
g Pechuga de pollo en filetes (no muy finos)
- 120
ml de Salsa de Soja
- 120
ml de Vino Blanco
- 2 Cucharaditas
de Jengibre en polvo
- 2
Cucharaditas de Ajo en polvo
- Maizena
- Aceite de Girasol
PREPARACIÓN:
Lo primero que
hacemos es preparar el macerado, para ello ponemos en un
bol los 120 ml de salsa de soja, los 120 ml de vino blanco, las 2
cucharaditas de jengibre en polvo y las 2 cucharaditas de ajo en polvo.
Con ayuda de unas varillas o un tenedor removemos bien para que se mezclen todos los ingredientes.
Con ayuda de unas varillas o un tenedor removemos bien para que se mezclen todos los ingredientes.
Seguidamente cortamos en
tiras de unos 2 cm de ancho los filetes de pollo, una vez cortados las ponemos
en el bol donde tenemos el macerado, cubriéndolas bien con el macerado. Tapamos
el bol con un poco film transparente y metemos en el frigorífico durante una
hora, para que tomen bien el sabor, si lo tenemos más tiempo no pasa nada.
Pasado este tiempo ponemos abundante aceite de girasol en una sartén, la llevamos al fuego para que se vaya calentando. Mientras tanto ponemos maizena en una bolsa (de congelar, etc.) añadimos unas tiras de pollo macerado e inflamos un poquito y vamos moviendo para que se enharinen las tiras de pollo.
Una vez que el aceite este bien caliente, vamos añadiendo tiras de pollo (no hay que añadir muchas a la vez, para que no se baje la temperatura del aceite), friéndolas por ambos lados hasta que estén doradas. Según las vamos friendo las sacamos sobre un papel absorbente (papel de cocina) para que desprendan el exceso de aceite.
Con esto solo queda llevar a la mesa y disfrutar de estas ricas y crujientes tiras de pollo. Las podemos acompañar de unas patatas fritas, verduras, etc.
Pasado este tiempo ponemos abundante aceite de girasol en una sartén, la llevamos al fuego para que se vaya calentando. Mientras tanto ponemos maizena en una bolsa (de congelar, etc.) añadimos unas tiras de pollo macerado e inflamos un poquito y vamos moviendo para que se enharinen las tiras de pollo.
Una vez que el aceite este bien caliente, vamos añadiendo tiras de pollo (no hay que añadir muchas a la vez, para que no se baje la temperatura del aceite), friéndolas por ambos lados hasta que estén doradas. Según las vamos friendo las sacamos sobre un papel absorbente (papel de cocina) para que desprendan el exceso de aceite.
Con esto solo queda llevar a la mesa y disfrutar de estas ricas y crujientes tiras de pollo. Las podemos acompañar de unas patatas fritas, verduras, etc.