23/12/2016

Desde la Puerta del Sol ¡Feliz Navidad!

Esta entrada es para desearos a tod@s una Feliz Navidad y que el próximo año 2017, venga cargado de cosas buenas para vosotros y toda vuestra familia.


Un fuerte abrazo Paco

22/12/2016

Galletas de Navidad

Hoy vamos a preparar unas ricas y fácil receta de galletas navideñas, les llamo navideñas porque las he dado forma de motivos navideños. Como veréis yo las he decorado con una glasa de distintos colores, tiñéndola con colorante alimenticio, pero perfectamente las podemos preparar sin la glasa y dejarlas tal cual, eso depende un poco de cada uno y del tiempo que tengamos para decorarlas. Yo recomiendo que para esta cantidad de galletas, con media clara de huevo es suficiente, para la glas, pues cunde mucho. Si decidimos no decorarlas son muy fáciles y rápidas de preparar. A estas galletas se las conoce como galletas de jengibre y canela y el resultado es muy bueno, pudiéndolas conservar en una lata por varios días sin problemas. 



INGREDIENTES:
- 260 g Harina  
- 150 g Mantequilla a temperatura ambiente
- 100 g Azúcar moreno
- 5 g Bicarbonato
- 1 Huevo
- 1 Cucharadita de jengibre molido
- 1 Cucharadita canela molida
- Pizca de sal
Para la glasa:
- 1 Clara de huevo
- Azúcar glass
- Unas gotas de limón

PREPARACIÓN:
      Lo primero que hacemos es preparar todos los ingredientes (pesados y medidos), esto hará que ahorremos tiempo a la hora de elaborar nuestra receta. Seguidamente ayudándonos de un colador, tamizamos los 260 g de harina, la cucharadita de jengibre, la cucharadita de canela, la pizca de sal y los 5 g de bicarbonato, poniéndolo en un bol amplio.


      Una vez tamizados estos ingredientes, mezclamos un poquito ayudándonos de un tenedor o cuchara. Acto seguido añadimos al bol los 100 g de azúcar moreno y mezclamos todos los ingredientes.


         Seguidamente batimos el huevo y lo añadimos al bol mezclándolo un poquito.


      A continuación añadimos los 150 g de mantequilla a temperatura ambiente (si la mantequilla está muy fría, la podemos poner un poquito en el microondas, para que se ablande), y mezclamos todo muy bien, cuando veamos que con el tenedor no podemos continuar amasando lo hacemos con las manos bien limpias, hasta conseguir una masa uniforme y compacta.


      Una vez preparada la masa hacemos una bola con ella y la envolvemos con film transparente y la dejamos reposar en el frigorífico una media hora.


      Mientras tanto podemos ir preparando nuestra glasa para decorar las galletas, para ello ponemos en un bol azúcar glass y la clara de huevo, mezclando todo muy bien con ayuda de un tenedor, según vamos mezclando iremos añadiendo azúcar glass, hasta conseguir una glasa espesa y uniforme, añadimos también unas gotas de limón y seguimos mezclando, la cantidad de azúcar glass depende del tamaño de la clara de huevo, una vez que hemos preparado la glasa la tapamos y reservamos en el frigorífico.


      Acto seguido encendemos el horno a 180º, por arriba y por abajo para que se vaya precalentando. Seguidamente sacamos nuestra masa de galletas del frigorífico, la ponemos en nuestra mesa de trabajo, sobre un papel de hornear y con ayuda de un rodillo de cocina, la estiramos uniformemente, dejándola con un grosos de 3 mm aproximadamente. Una vez estiradas y con ayuda de un corta pastas o moldes con motivos navideños, vamos cortando nuestras galletas. Una vez cortadas las ponemos en una bandeja de horno, forrada con papel de hornear y las metemos en el horno, que ya estará precalentado a 180º, durante aproximadamente 10 o 12 minutos, dependiendo de cada horno. Pasado este tiempo sacamos del horno y las dejamos enfriar un poco.


Una vez frías y ayudándonos de un palillo o de una manga pastelera pequeña, vamos decorando nuestras galletas, con la glasa que hemos preparado anteriormente, tiñendo la glasa con colorante alimenticio, de los colores que más nos guste.


      Con esto solo falta degustar estas ricas galletas de Navidad. Para esta receta podemos pedir ayuda a los más pequeños de la casa, que seguro que les encantara participar.


Como veréis en las fotografías, lo mío no es decorar galletas. Je,je,je……

14/12/2016

Tarta de queso royal

La receta de hoy se la tenemos que agradecer a nuestra querida amiga Raquel Fernández, a la cual quiero darle las gracias por haber tenido la amabilidad de enviármela, para poder compartirla con todos vosotros. La receta es una deliciosa tarta de queso muy rica y suave al paladar nada empalagosa. El nombre que tiene esta tarta, según me comenta Raquel es porque su sabor recuerda a la tarta de esta famosa marca, aunque esta es mucho más buena. La receta como veréis no tiene ninguna complicación y se prepara  en pocos minutos, con pocos ingredientes y muy asequibles. Lo único que tenemos que esperar unas horas hasta que la gelatina haga su labor y cuaje nuestra tarta, aunque lo ideal es prepararla de un día para otro. Bueno no me enrollo más solo darle de nuevo las gracias a nuestra amiga Raquel Fernández, por esta maravillosa receta.



INGREDIENTES:
- 300 g Queso de untar (tipo philadelphia)  
- 400 ml Nata (35 % materia grasa)
- 150 g Azúcar
- 7 Láminas de gelatina (neutra)
- 1 Paquete galletas maría (yo le he puesto galletas digestive)
- 90 g Mantequilla o margarina
- Mermelada o confitura de frambuesa (o la que más nos guste)

PREPARACIÓN:
      Empezamos nuestra receta poniendo en un bol las 7 hojas de gelatina, cubiertas con abundante agua fría, para que se vayan hidratando, las tenemos que tener en el agua por lo menos unos 10 minutos. Seguidamente trituramos  las galletas con ayuda de un robot o batidora, si no disponemos de ella las podemos meter en una bolsa y pasarles un rodillo, o una botella, hasta que estén trituradas. Seguidamente fundimos los 90 g de mantequilla en el microondas (al poner la mantequilla en el microondas para fundir, ponemos también un vaso con agua para que no salte), una vez fundida la añadimos a las galletas molidas, mezclando todo para formar una masa. A continuación cubrimos la base de nuestro molde (desmontable yo de 20 cm), con la masa de las galletas, ayudándonos del reverso de una cuchara, o con las manos bien limpias. Seguidamente metemos el molde en el frigorífico y reservamos.


      A continuación  ponemos en un cazo los 400 ml de nata, los 300 g de queso de untar y los 150 g de azúcar. Lo llevamos al fuego no muy alto y con ayuda de unas varillas, vamos removiendo bien, hasta que el queso y el azúcar se hayan incorporado por completo a la nata y no tenga grumos, veremos que enseguida que se calienta un poco, no tarda nada en incorporarse.


      Seguidamente escurrimos las hojas de gelatina que tenemos en el agua fría y las añadimos al cazo, removiendo bien hasta que se deshagan, veréis que enseguida se funden (Muy importante y que tenemos que tener en cuenta, es que la mezcla no tiene que llegar a hervir, porque si hierve la gelatina ya no hace su labor y nuestra tarta no cuajaría). Seguidamente sacamos nuestro molde con la base de galletas del frigorífico, y vertemos en el la mezcla que tenemos en el cazo, ayudándonos de un cucharon, para que no caiga de golpe sobre la base de galletas y estas se desmenucen. A continuación metemos nuestra tarta en el frigorífico, hasta que la gelatina haga su labor y cuaje nuestra tarta, lo ideal es dejarla en el frigorífico, de un día para otro.


      Pasado este tiempo sacamos nuestra tarta del frigorífico, desmoldamos con cuidado, ayudándonos de un cuchillo y decoramos poniéndole por la superficie, un poco de confitura o mermelada de frambuesa o la que más nos guste.


      También le podéis poner unas moras, frambuesas, grosellas, etc., para que os quede más bonita, eso ya como veáis vosotros. Un postre muy rico y suave para estas próximas fiestas de Navidad.


¡MUCHAS GRACIAS RAQUEL! 

10/12/2016

Tostas tierra y mar

Hoy vamos a preparar una rica tapa o aperitivo, que son ideales para ponerlas como entrante o para ir abriendo boca. Se trata de unas tostas untadas con un puré de patatas, con ali olí y cubiertas con un poquito de morcilla de Burgos y bacalao confitado, que estoy seguro que os van a gustar. El bacalao que yo he utilizado ha sido, del que venden desalado y en trozos pequeños. La cantidad de los ingredientes depende de las tostas que vayamos a preparar, también podemos utilizar morcilla de cebolla en lugar de la de Burgos, dependiendo de nuestros gustos, el resultado será igual de bueno. Una receta rica, fácil y sin ningún misterio.



INGREDIENTES:
- 2 o 3 patatas  
- 300 g de Bacalao desalado
- 1 morcilla de burgos
- 2 o 3 Cucharadas de mayonesa
- 1 Cucharada de queso de untar
- 2 Ajos
- Rebanadas de pan
- Pimientos de piquillo
- Aceite de oliva
- Sal

PREPARACIÓN:
      Lo primero que hacemos es lavar nuestras patatas y ponerlas a cocer en abundante agua, durante aproximadamente 25 minutos, dependiendo del tamaño de las mismas. Una vez cocidas dejamos enfriar un poquito, las pelamos y con ayuda de un tenedor hacemos un puré, que reservamos para más adelante.


     Mientras se cuecen las patatas vamos confitando el bacalao. Para ello ponemos abundante aceite en un cazo o sartén, la llevamos al fuego no muy alto y cuando veamos que el aceite ha alcanzado, una temperatura aproximada de 60 o 70 grados, añadimos el bacalao dejando confitarse a esa temperatura unos 20 minutos, de todas formas nuestro bacalao estará listo, cuando veamos que con una ligera presión, se separan las lascas (también podemos antes de poner el bacalao a confitar, sofreír unas láminas de ajo en el aceite, retirándolas cuando estén doradas, para que el bacalao tome sabor). Una vez confitado retiramos del fuego dejamos escurrir el exceso de aceite y desmenuzamos un poquito.


      A continuación pelamos los 2 ajos los ponemos en el mortero con un poquito de sal y los machacamos. Una vez machacados los ajos añadimos al mortero 2 o 3 cucharadas de mayonesa y mezclamos bien con los ajos, para formar un ali olí con la mayonesa.


     Seguidamente añadimos este ali olí al cuenco donde tenemos el puré de patatas y mezclamos bien, acto seguido añadimos las dos cucharadas de queso de untar y seguimos mezclando, hasta formar una pasta homogénea.


      A continuación le quitamos la piel a nuestra morcilla y la sofreímos un poquito, desmenuzándola al mismo tiempo que la freímos. Seguidamente solo nos queda montar nuestras tostas, para ello partimos el pan en rebanadas, untando cada una de las rebanadas de pan, con una capa del puré de patatas mezclado con el ali olí y el queso, seguidamente ponemos un poquito de morcilla, ponemos a continuación unas lascas de bacalao en cada una y encima un par de tiras de pimiento de piquillo.


      Con esto solo nos queda llevar a la mesa y disfrutar de esta sencilla, pero exquisita tosta. 


¡Espero que os guste y os animéis a prepararlas!

04/12/2016

Tarta de Turrón de Jijona (turrón blando)

La receta de hoy es ya pensando en las próximas fiestas Navideñas, se trata de una tarta de turrón de Jijona (turrón blando), muy rica suave y fácil de preparar. Esta tarta la podemos preparar con uno o dos días de antelación y tenerla en el frigorífico, hasta la hora de servir, además no necesitas horno para prepararla. Bueno no me enrollo mas, solo deciros que espero que os guste y os animéis a prepararla.



INGREDIENTES:
- 1 Tableta de turrón de Jijona (300 g)
- 1 Paquete galletas (tipo maría)
- 100 g Mantequilla
- 100 g Azúcar glass
- 400 ml Nata para montar
- 250 ml Leche
- 50 ml Agua (caliente)
- 6 Láminas de gelatina neutra
- Almendra crocanti (para decorar)

PREPARACIÓN:
      Empezamos nuestra receta preparando todos los ingredientes para tenerlos a mano, esto nos hará ahorrar tiempo en la cocina, a la hora de preparar la receta, esto sirve para cualquier receta que vayamos a preparar. A continuación ponemos en un bol agua fría y añadimos las 6 hojas de gelatina, para que se vayan hidratando.


      Seguidamente trituramos las galletas con ayuda de un robot o batidora, si no disponemos de ella las podemos meter en una bolsa y pasarles un rodillo, o una botella, hasta que estén trituradas. Seguidamente fundimos los 100 g de mantequilla, añadiéndolo a las galletas molidas, mezclando todo para formar una masa.


      A continuación cubrimos la base de nuestro molde (desmontable), con la masa de las galletas, ayudándonos del reverso de una cuchara, o con las manos bien limpias. Seguidamente metemos el molde en el frigorífico y reservamos.


     A continuación partimos el turrón de jijona en trocitos, lo ponemos en un cazo y añadimos los 250 ml de leche, lo llevamos a fuego medio y sin dejar de remover para que no se pegue, tendremos en el fuego unos 5 minutos, para que se caliente y se deshaga el turrón. Pasado este tiempo retiramos de fuego y con ayuda de la batidora, trituramos todo muy bien para que no quede ningún grumo y reservamos.


      Seguidamente ponemos en un bol amplio los 50 ml de agua caliente y añadimos las 6 hojas de gelatina, escurriéndolas del agua fría, con ayuda de un tenedor o unas varillas, mezclamos bien para que la gelatina se disuelva en el agua caliente.


      A continuación añadimos al bol de la gelatina, la mezcla de turrón y leche que tenemos reservada, removiendo al mismo tiempo para que se mezcle bien con la gelatina (importante añadir la mezcla de turrón a la gelatina disuelta con agua y no al revés).


      Seguidamente vamos a montar nuestra nata, para ello ponemos en un bol, los 400 ml de nata y con ayuda de unas varillas, si son eléctricas mejor, montamos nuestra nata, cuando veamos que prácticamente está montada añadimos los 100 g de azúcar y montamos otro poco, hasta que el azúcar este incorporada y nuestra nata haga picos, ojo si nos pasamos al montarla, la nata se convertirá en mantequilla. Un truco para montar nuestra nata, es que a la hora de montarla tiene que estar bien fría, también es recomendable que el recipiente donde la montemos, este también frio.


      Seguidamente mezclamos la nata montada con la mezcla de turrón, esto lo hacemos poco a poco y con movimientos envolventes (no remover) para evitar que la nata se baje lo menos posible.


      A continuación sacamos nuestro molde con la base de galletas del frigorífico, vertiendo en el la mezcla que hemos preparado, ayudándonos de un cucharon o cuchara para que la mezcla no caiga de golpe sobre la base de galletas, por si la pudiera romper. Seguidamente metemos en el frigorífico, como mínimo 6 horas, hasta que la gelatina haga su trabajo y cuaje nuestra tarta, aunque lo ideal es dejarla de un día para otro. Pasado este tiempo sacamos nuestra tarta de turrón del frigorífico y decoramos con unas poquitas almendras crocanti, por toda la superficie, con esto solo nos queda desmoldar nuestra tarta y lista para servir.


      La podemos conservar en el frigorífico, hasta la hora de llevar a la mesa. Una tarta muy rica e ideal para estas próximas fiestas de Navidad.  

Torrijas caramelizadas